La industria de gas y petróleo realiza sus operaciones mediante una cadena de suministro que incluye el transporte y distribución de los productos, desde los puntos de origen hacia los mercados de destino. Por esta razón, es una etapa esencial para los proyectos de ingeniería del sector, ya que los pozos petrolíferos suelen estar muy alejados de las zonas de refinería y consumo.
La cadena de suministro para la industria de hidrocarburos está compuesta de tres niveles: el primero es el sector upstream, el cual se encarga de encontrar y producir el crudo y gas natural. Luego, encontramos el sector midstream que maneja el proceso, almacenamiento y transporte de productos energéticos. Finalmente, el sector downstream es el que abarca refinerías, puntos de venta y compañías de distribución de gas natural.
Asimismo, existen diversos medios de transporte del petróleo, pero hay dos que son los más utilizados: los oleoductos de caudal continuo y los buques petroleros. Los demás transportes como los vagones, cisterna, camiones, ferrocarriles o barcos de cabotaje, suelen utilizarse para la distribución de los productos que se derivan del crudo.
Medios de transporte del petróleo
Para entrar a más detalle y tomando de ejemplo a los oleoductos, podemos mencionar que estos resultan clave para comprender cómo se transporta y distribuye el petróleo. Además, los definimos como un conjunto de instalaciones conformadas por tuberías que permiten el transporte de petróleo. Como dato de interés, de acuerdo con predicciones de la OPEP, para el 2040 los oleoductos cubrirán más del 50% de todas las necesidades energéticas del mundo
Asimismo, los oleoductos incluyen las instalaciones necesarias para su explotación como: Depósitos de almacenamiento, estaciones de bombeo, equipos de limpieza, entre otros. Pero estos no solo transportan petróleo crudo, sino que incluso a veces conectan los tanques de almacenamiento de campo directamente a los tanques de almacenamiento de la refinería. Se estima que actualmente existen más de 1.500.000 kilómetros de oleoductos utilizados para transportar crudo y productos terminados en todo el mundo.
Dentro de este contexto, el segmento midstream cumple una tarea compleja y de alta importancia en el procesamiento de toda la cadena de producción del petróleo y gas para su utilización comercial. Los procesos que allí tienen lugar se resumen en términos de transporte de combustible (post-extracción) y conversión de este componente para su distribución y post-procesamiento.
Como conclusión, me gustaría cerrar con la siguiente reflexión: Creo fundamental que las empresas cuenten con un equipo altamente especializado en las distintas etapas del proceso, fases que sin duda están interconectadas, como recolección, procesamiento, comprensión y fraccionamiento para asegurar una puesta en marcha exitosa de las condiciones de trabajo en la industria.