El sector petrolero se enfrenta a una crisis económica extremadamente complicada. Entre las preocupaciones ambientales que afectan a la industria y las pérdidas debido al efecto del COVID-19, las empresas petroleras se ven obligadas a  explorar cambios para sobrevivir y seguir adelante. 

Es precisamente eso lo que nos explica este reportaje de la revista World Oil aptamente titulado “Ganar tiempo, digitalizar y transicionar”: en esta etapa tan crítica las empresas petroleras están ahora muy centradas en la reducción de costos y en la optimización de activos existentes y, para lograrlo, la industria en general necesita digitalizarse más profundamente y más rápido para aumentar su resistencia y competitividad. Ya no se trata de la competitividad de activos individuales, sino de la industria en general. Necesitamos enfoques nuevos y más radicales, para reducir costos y aprovechar oportunidades con el fin de mantenernos relevantes en la transición energética. 

El artículo explica que para sobrevivir hacen falta tres cosas fundamentales: 

  1. Productividad a corto plazo y optimización de la eficiencia, para ganar tiempo.
  2. Digitalización, para ayudar a mantener las ganancias/ahorros a corto plazo.
  3. Sostenibilidad, a través de la gestión del portafolio de activos para posicionarse para el éxito a largo plazo en la transición energética.

Los esfuerzos se deben centrar en impulsar cambios que definan el portafolio base, ya sea mediante el desarrollo de nuevos proyectos o la mejora de activos existentes. De estos dos caminos, y considerando las presiones económicas que pueden representar nuevos proyectos, la más viable es poder optimizar operaciones ya activas, lo cual se debe lograr en el contexto de un modelo operativo comercial altamente eficiente que abarque las capacidades de procesamiento de la planta, la gobernanza y los derechos de diseño, el modelo organizativo, los procesos operativos, la tecnología y la estrategia de talento.

Nuestra forma de responder a esta coyuntura desde Nakasawa ha sido dedicar un enorme esfuerzo a desarrollar nuestra tecnología Super Matroid Heater, que mantiene y desarrollar estos tres pilares claves de:

  1. Productividad: El SMH incrementa la transferencia de calor al yacimiento incrementando la movilidad del crudo y por lo tanto, la productividad de los yacimientos. Promete un incremento de hasta un 15% en la producción de crudo y ahorros de hasta un 25% en costos operacionales. Además los sistemas son completamente portátiles y pueden instalarse sobre cualquier OTSG tradicional.
  2. Digitalización: Como parte integral del proceso, el SMH incluye el monitoreo automatizado de los parámetros de operación durante todas las etapas para llevar un control exhaustivo de las operaciones y garantizar un óptimo desempeño de los equipos.
  3. Sostenibilidad: El uso del SMH permite que el proceso para cumplir con el suministro de calor se lleve a cabo bajo un control de emisiones de gases, disminuyendo su concentración en comparación al uso del OTSG convencional. Adicionalmente,con el SMH se consume un 12% menos de agua y gas combustible.

Para conocer más sobre el Super Matroid Heater visita https://supermatroidheater.com/